Cómo ser una mejor persona más “recicladora” en 8 pasos
A continuación te damos algunas pautas de cómo puedes mejorar tus pautas de reciclado siguiendo 8 sencillas recomendaciones
1.- Infórmate sobre lo que se puede reciclar cerca de tu casa.
Hay una gran diferencia entre «teóricamente reciclable» y «realmente reciclado». Muchas cosas se pueden reciclar en teoría, pero no lo son, porque es demasiado caro de procesar, no hay suficiente volumen para que sea viable o no hay suficiente demanda para el producto reciclado.
Las empresas quieren que pensemos que sus productos son reciclables y, por lo tanto, salpican logotipos de reciclaje en todo el embalaje. Pero si no es un material que sea reciclable en tu área, no será reciclado, sin embargo, tanto tu como la compañía que produjo el packaging queréis que lo sea.
Necesitas saber qué es reciclable en la zona dónde vives. Lo que es reciclable en el extranjero o incluso en la ciudad de al lado a a la tuya, no es necesariamente lo que es reciclable para ti.
Si tienes contenedores de reciclado en tu barrio, es tu Ayuntamiento el que proporciona el servicio (ya sea ellos mismos o subcontratando el servicio). Ponte en contacto con ellos para averiguar qué se puede y que no se puede reciclar. Probablemente tendrán información en su sitio web, también puedes contactar con ellos por teléfono, mail o en sus perfiles sociales.
2.- ¡Sigue las reglas!
El reciclaje es diferente en todas partes, y las reglas que tu Ayuntamiento te pide que sigas son las que debe seguir. Si ves algo que parece ser una idea mucho mejor en Internet pero va en contra de lo que tu Ayuntamiento dice que hagas, ¡no te sientas tentado!
3.- Limpia tus reciclables
Ya sea porque tu Ayuntamiento te lo indique o no, siempre es mejor enjuagar tus productos sucios reciclables. (Usa el agua que sobra al final de lavar tus platos, y enjuágualos rápidamente). Existe la posibilidad de que alguien en algún lugar tenga que manejarlos o respirar el aire donde se procesan y almacenan.
Puede que no sea necesario para la maquinaria, pero es mejor para las personas que trabajan en la industria. La comida seca fermentada para gatos o la leche agria nunca aumenta el valor de los materiales reciclables, nunca…
4.- Buscar actualizaciones regularmente
Lo que es reciclable ahora no es necesariamente lo mismo que lo que fue reciclable hace 6 meses, y podría volver a cambiar dentro de 6 meses. Esto se debe a que los materiales reciclables son productos básicos y su valor aumenta y disminuye con la oferta y la demanda. Muchas instalaciones de recuperación de materiales venden materiales reciclables mediante contratos a corto plazo, tal vez hasta 3 meses.
Los mercados fluctuantes afectan el precio, y si algo no es lo suficientemente valioso para reciclar, no se reciclará.
No asumas que sólo porque verificaste las pautas de reciclaje del Ayuntamiento una vez en 1997, la información que recuerdas de esa fecha todavía es relevante hoy. ¡Probablemente no lo será! Es una práctica mucho mejor consultar con tu Gobierno local cada tres meses aproximadamente, para averiguar qué ha cambiado.
Por ejemplo, hasta no hace mucho, el aceite de tu cocina no se recogía, ahora hay muchos pueblos que ya lo están recogiendo
5.- Busca soluciones alternativas
El reciclaje no se limita a los sistemas de recolección que están al lado de tu casa . Se pueden reciclar muchas cosas en los contenedores que instalan los Ayuntamientos o entidades acreditadas.
Los textiles, las bombillas, la pintura, la chatarra, los cartuchos de impresora, restos de fármacos los residuos electrónicos (productos electrónicos antiguos) y el aceite pueden reciclarse y se pueden entregar en negocios autorizados
En sitios como www.ecoembes.com puedes encontrar información adicional sobre dónde reciclar estos materiales concretos
6.- No inventes
A veces nos gustaría poner algo en la papelera de reciclaje para que fuera reciclado, aunque sabemos que la papelera de reciclaje no es el lugar adecuado para ello. No lo hagas (Sí, todos queremos que todo sea reciclable y todos nos sentimos culpables por los vertederos. ¡Pero el deseo no es la respuesta!)
Reciclar adecuadamente puede requerir un poco más de trabajo, averiguar dónde ir y luego dejar el producto.
Debes invertir un poco de tiempo para encontrar el mejor lugar para el artículo que deseas reciclar. Y si realmente no puedes encontrar un lugar para llevar el artículo a reciclar donde vives, acepta que tiene que ir al contenedor general de basura y por tanto al vertedero. (El siguiente paso es descubrir cómo evitar ese elemento nuevamente en el futuro).
7.- Menos reciclaje es mejor
Cuando digo «ser un mejor reciclador» no me refiero a «reciclar más». Menos reciclaje es mejor. Eso es menos camiones en las carreteras, menos maquinaria clasificadora, menos energía gastada en el procesamiento de nuestros materiales reciclables, menos recursos consumidos. Un contenedor de reciclaje vacío es mejor que un contenedor de reciclaje completo.
Sí, al comienzo de nuestro viaje, todos comenzamos con un contenedor de reciclaje lleno a rebosar. Muchas personas están orgullosas (y en parte tienen razón y están en el camino correcto) de dicho contenedor de reciclaje desbordado.
Es un viaje, y uno que comienza con los máximos trabajos de reciclaje … pero ese viaje debe llevar hacia reducir nuestro consumo.
Primero, aprendemos exactamente lo que entra en nuestra papelera de reciclaje, luego aprendemos dónde reciclar todas las demás cosas, y luego empezamos a pensar en cómo reducir nuestro reciclaje.
El reciclaje es donde empezamos. ¡No es donde nos detenemos!
8.- Rechazar, reducir, reutilizar (antes de reciclar)
Si vamos a trabajar en realizar menos reciclaje, debemos estar pensando primero en el flujo de residuos. Tenemos que estar pensando en rechazar, reducir y reutilizar. El rechazo ocurre cuando evitamos un producto por su embalaje y los materiales que deben ser reciclados en primer lugar. Elegir productos sueltos o a granel sobre productos envasados, no llevar una bolsa de plástico… etc.
La reducción ocurre cuando sabemos que necesitamos algún tipo de embalaje, pero intentamos limitar lo que tomamos. Optar por el paquete más grande en lugar del paquete múltiple de paquetes envueltos individualmente, o elegir una botella de zumo de 1 litro en lugar de varias de pocos centilitros
La reutilización sucede cuando llevamos nuestros propios reutilizables a las tiendas: nos llevamos nuestros tuppers cuando vamos a la carnicería o a la pecadería. Nos llevamos la bolsa en la que compramos los tomates para cargar el pan…
Al analizar los packagings que entran en nuestra papelera de reciclaje, podemos ver exactamente dónde podríamos hacerlo mejor y comenzar a buscar soluciones.